“Pensar la ciudad”, El Argentino (edición Rosario), 15-04-13.



Por Sebastián Artola (*).

La reacción del gobierno nacional frente al trágico temporal en La Plata y en la ciudad de Buenos Aires, deja en claro las diferencias con el modelo de Estado y de representación política que gobierna Santa Fe y Rosario.
Si por un lado pudimos ver a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner poner el cuerpo, dar la cara, hablar mano a mano con los vecinos, recorrer los centros de asistencia, estar junto a los voluntarios y anunciar medidas de reparación para los damnificados como los créditos para la refacción de casas, la duplicación de la Asignación Familiar, la Asignación Universal y de Embarazo por tres meses, más un adicional de 4330 pesos en dos cuotas para los jubilados y pensionados que cobran la mínima.
Durante el temporal del 19 y 20 de diciembre del año pasado en Rosario, los vecinos de los doce barrios inundados con suerte pudieron ver el helicóptero con el que Mónica Fein y Antonio Bonfatti recorrían la ciudad, bien lejos de lo que pasaba en cada lugar, sin ningún tipo de respuesta, más que las donaciones que la militancia pudo llevar a las zonas más humildes de la ciudad.
Desde el primer momento, el municipio y la provincia se sacaron toda la responsabilidad de encima, cuando es sabido que la falta de recolección de residuos, el atraso en las obras públicas, la limpieza de las zanjas o la inexistencia de las mismas en los barrios más postergados, fueron las causas de tamaña inundación.
Recién en estos días, y a casi cuatro meses del temporal, anunciaron una línea de crédito del Banco Municipal, a los que muy pocos van a acceder dada la condición de vulnerabilidad de muchas de las familias inundadas, y un pedido al gobierno nacional de asistencia para los vecinos damnificados, que una vez más huele a chicana política y al recurrente hábito de patear la pelota para otro lado, que a una respuesta concreta para quienes hoy más necesitan del Estado municipal.

(*) Foro Rosario para Todos.