Franco nos invitó a su casa en Barrio Godoy y el miércoles ahí estuvimos.
Nos recibió junto a su mujer, Silvia, su hijo Samuel y vecinos del barrio, en
la zona oeste de nuestra ciudad, justo en el límite con Pérez.
Franco llegó a Rosario en el 2004 desde su Chaco
natal y desde entonces echó raíces en Rosario, formando una hermosa familia.
Trabaja en el servicio de limpieza del
supermercado Coto y apoya la Ley de Descanso Dominical. “Es un apriete a la
democracia”, nos dice en relación a las despedidos de la empresa tras la
aprobación de la ley en la legislatura provincial.
También cursa la carrera de Psicología en la Universidad Nacional de
Rosario. Desde siempre se interesó por la militancia y el compromiso con el
otro. Hoy quiere luchar juntos a sus vecinos por los derechos de un barrio que
no tiene agua potable y servicio de energía eléctrica, y por las obras públicas
prometidas y nunca realizadas.
Incluso, nos cuentan, que las calles de tierra y con aguas servidas en
las zanjas permanentemente, figuran como pavimentadas para el municipio.
De todos y cada uno depende conquistar #NuestroDerechoARosario. Sumate
vos también a luchar por la ciudad que soñamos! #SebaEnTuBarrio.