A continuación les dejamos la desgrabación de las palabras de Sebastián
Artola en el Plenario de Fin de Año:
“Buenas tardes para todos,
gracias por estar todos los compañeros y compañeras. Estamos a fin de año, 17
de diciembre, jueves, un día que no es fácil convocarse, y a su vez algunos de
los que estamos acá estuvimos hace un rato en la plaza 25 de Mayo participando
y acompañando, una vez más, la movida que se hizo esta semana en defensa de la
Ley de Medios. Es un fin de año movido, militante, que nos convoca a todos y esta
fuerza política está demostrando, una vez más, que le pone el cuerpo, que le
pone el pecho y que va a decir presente más que nunca en los desafíos que se
nos vienen para los próximos tiempos”.
“En nuestro caso, este año ha
sido largo, un año que duró más de 365 días, un año que prácticamente desde
principios de noviembre del año pasado no tuvimos descanso, cuando largamos la
candidatura para el concejo municipal, y desde fin del año pasado no hubo
semana en que aflojáramos nuestra militancia. Terminada la campaña local, se
viene la nacional, y sobre todo en esas tres semanas y pico del ballotage
estuvimos dejando todo lo que a nuestra alcance estaba”.
“Agradecer a todos los compañeros
de Rosario para la Victoria, y a todos los compañero que en el transcurso de
este último tiempo se han ido incorporando a nuestra propuesta política,
acompañando, participando, haciendo su aporte, porque creo que la realidad
misma de estas horas, de estos días, va marcando la necesidad de reafirmar
compromisos, de participar, de ponerle el cuerpo, de transformar esa mala
noticia que tuvimos en el ballotage del 22 de noviembre cuando Macri
efectivamente resultó ser electo presidente, pero frente a esa preocupación
como lo dijimos en su momento, había que transformarla en más compromiso, en
más participación, en más militancia, que es sin dudas el camino que tenemos en
Rosario y en nuestro país para hacer frente a este proyecto liberal que está
llevando adelante a cabo Macri, este proyecto para unos pocos y la mejor manera
de defender las conquistas que en estos 12 años logramos de la mano de Néstor y
Cristina”.
“En Argentina ganó una fuerza
política de derecha, que tiene un programa económico neoliberal y que en
consecuencia van a llevar adelante una política que tienda a hacer de la
Argentina un país para pocos. En estos días cada una de las medidas, sobre todo
en el plano económico, tiende a eso. Se eliminaron las retenciones para todos
los productos, salvo para la soja que se bajó al 30%, ayer nos enteramos que se
terminó el cepo al dólar, se anunció también la apertura comercial, y ayer Prat
Gay anunció también anunció que se iba a pedir un préstamo por 15 mil millones
de dólares. ¿Qué significa todo esto? Que el Estado se empieza a retirar de la
regulación del mercado y que nuevamente el mercado vuelve a definir la política
económica, la política de producción, el precio del dólar, la manera en que se
compra, etc. La consecuencia de eso implica un fenomenal traslado de recursos
del pueblo argentino - y cuando digo ‘pueblo argentino’ digo las clases medias,
pequeños y medianos comerciantes, pequeños y medianos productores, los
asalariados, los compañeros de los barrios más postergados – a las clases
dominantes, a los sectores más chicos de nuestra sociedad que son los que
tienen el mayor poder económico. Así como ellos, de golpe y porrazo, con la
devaluación acrecientan sus ganancias en dólares casi un 50%, el poder
adquisitivo del laburante por esta devaluación del peso decae casi la misma
proporción, un 45%. Y hacia futuro está anunciada la eliminación de los
subsidios al gas y a la electricidad que eso afecto a sectores medios. Es la
puesta en práctica de un proyecto de país para pocos y es revertir la matriz de
crecimiento con redistribución justa de la riqueza que habíamos logrado en 12
años, para volver al país que concentra la riqueza y lleva adelante políticas
públicas de distribución regresiva del ingreso. Este es el fondo y el objetivo
de las medidas que el gobierno de Macri anunció en estos días”.
“En Argentina volvió a gobernar
el poder económico, el poder corporativo, con Néstor y Cristina el Estado
tomaba definiciones que tocaban los intereses del poder corporativo. ¿Quién es
el poder económico? Son los tipos que exportan soja, trigo, carne - lo que
llamamos el complejo agro-exportador argentino -, o sea los grandes
propietarios del campo; el poder financiero – los bancos privados y
extranjeros; y el capital industrial más concentrado, las grandes industrias,
desde Techint hasta Arcor, son los que producen, distribuyen y definen los
precios de la mesa argentina. Cuando uno define estos tres sectores como el
‘poder económico’, estos son los tipos que se creen dueños de la Argentina, son
los que hicieron de la Argentina un país para pocos, los tipos que propiciaron el
golpe militar del ’76, los que condicionaron y le torcieron el brazo a Alfonsín, los que le decían que hacer a Menem
y a la Alianza, y a los que le empezamos a poner un freno con Néstor y Cristina.
Estos tipos que habían quedado sin tener decisión en el Ejecutivo nacional,
volvieron a ser gobierno de la mano de Macri”.
“El poder económico para gobernar
necesita tener representación. ¿En el siglo XX cómo lograban esa
representación? A través de golpes de Estado, porque por elecciones nunca
pudieron ganar. ¿Desde fines de los ’80 cómo lograron tener representación?
Cooptando los partidos populares. Alfonsín que empezó con iniciativas
progresista desde el 83 al 85, a partir del 85 estos tipos se lo llevaron
puesto y terminó haciendo, en términos de plan económico, todo lo que le
pedían. Menem expresó la cooptación del poder económico del otro partido
popular de la Argentina que es el
peronismo. Esto lo perdieron con el kirchnerismo que volvió a recuperar al
peronismo como partido nacional y popular, y tuvieron que crear una nueva
fuerza política para competir en las elecciones, para volver a tener
representación y volver a ocupar el Estado. Este fue el sentido bajo el cual se
creó el PRO allá por el año 2001”.
“Nunca antes se había visto un gobierno con tantos empresarios y
ejecutivos de las principales empresas del país”.
“Es importantísimo pensar la
disputa en Argentina, desde la Independencia hasta el presente, en base a dos
grandes proyectos de país. O una Argentina para poco del poder económico o una
Argentina para todos del poder político popular que surge de las mayorías
nacionales”.
“Me interesa poder pensar en qué
momento estamos. No es un momento de resistencia parecido a los otros en los
que estuvimos. En esto tenemos que ser inteligentes. En el siglo XX tuvimos muy
pocos gobiernos populares. Uno puede pensar Yrigoyen, un gobierno popular y
democrático con todas las contradicciones y limitaciones, que gobernó entre el
’16 y 1922, y entre el ’28 y el ‘30. El peronismo, entre 1946 y 1955. Y sólo
tres años más entre 1973 y 1976. Si sumamos, en 100 años del siglo XX tuvimos
sólo 20 años de gobiernos populares y democráticos. Nosotros venimos de una
experiencia de 12 años de un gobierno democrático, nacional y popular, en sólo
15 del siglo XX. El piso desde el cual tenemos que pensar lo que hacemos,
seguir militando, resistir y sobre todo cómo pensamos la vuelta al gobierno del
país, cómo pensamos la construcción de una alternativa política para la
provincia de Santa Fe y para la ciudad de Rosario, es un piso más alto desde el
cual nosotros resistimos en el siglo XX. Por varias cosas: porque venimos de una
experiencia de gobierno de 12 años, de tres mandatos, el de Néstor y los dos de
Cristina, donde logramos transformar hasta lo que se pudo, con muchas cosas
pendientes, pero venimos de una experiencia inmediata de gobierno”.
“Por el otro lado, porque tenemos
una fuerza política que está intacta, que tiene identidad, que para nosotros es
sin dudas el Frente para la Victoria, al que más que nunca hay que fortalecer,
llenar de participación, de pueblo y de militancia. Tenemos que apostar a que
el Frente para la Victoria no sólo sea el nombre bajo el cual nos presentamos a
elecciones, tiene que ser la identidad de todos los compatriotas que están
saliendo a la calle a bancar las conquistas logradas y a resistir lo que Macri
quiere llevar adelante”.
“Tenemos un liderazgo político
que es el de Cristina. Para nosotros es indiscutible el liderazgo de Cristina
en esta etapa”.
“Y tenemos un pueblo movilizado
como se demostró en las tres semanas de ballotage, como se demostró esta
semana, que al contrario de irse a su casa está demostrando una vocación de
salir a defender y a bancar”.
“Es una resistencia muy distinta
a la de los años ’90. Cuando militábamos en los ‘90 militábamos defendiendo
como podíamos que no nos saquen lo último. No teníamos fuerza política, no
teníamos un liderazgo político nacional, no veníamos de experiencia de
gobierno, el pueblo no estaba movilizado, recién en la segunda mitad de los
años noventa. Me parece que hoy estamos en otras condiciones. En consecuencia
debemos pensar de otra manera de defender lo conquistado, de resistir, de no
dar un paso atrás. Me parece que nosotros debemos ocupar la calle cuando así
sea necesario, pero sobre todo pensar que es imprescindible seguir construyendo
una fuerza política militante”.
“No teníamos a Rosario para la
Victoria antes del 2003, hoy la tenemos como una de las organizaciones
militantes con presencia en el territorio, con dinamismo, con compañeros que
fundan su convicción en la política como conjunto de valores que no los
vendemos, que no se compran, y que es el legado y la fortaleza más importante
que tiene el Proyecto Nacional. Aspiramos a seguir haciendo crecer esta
organización, convencidos que tiene que
marcar también el camino bajo el cual esta resistencia ciudadana que se está
dando en la calle pueda pensar su presente y sobre todo pueda pensar la
posibilidad futura de construir, no sólo una resistencia cada vez más masiva
hacia lo que quiera llevar adelante Macri en términos de medidas antipopulares,
antinacionales, antidemocráticas, sino también de esa resistencia gestar
alternativas políticas en condiciones de la ciudad, de la provincia y de la
Argentina en los próximos años, y sobre todo que volvamos a estar en
condiciones de ganar elecciones”.
“Nuestro horizonte tiene que
estar en cómo cada día estamos más comprometidos en la defensa de las
conquistas, pero también como desde esa participación ciudadana en la calle
vamos gestando organización política y, de la mano, representación política
para las futuras disputas políticas pero también electorales, para que estemos
en condiciones de volver a ganar las elecciones”.
“Hicimos en su momento un balance
de porqué se había perdido. Evidentemente no es fácil confrontar contra el
poder económico, siempre produce un desgaste que desafía mucho al poder
político popular para volverse inmune a eso y saber recrearse. Ese desgaste
nuestro proyecto lo tuvo, confrontamos contra poder corporativos, poderes
económicos, a través del partido mediático”.
“Eso es una parte, hay otra que
tiene que ver con nosotros, siempre tenemos que tener el oído puesto en las
necesidades de nuestros pueblo, en las nuevas demandas de la sociedad, en cómo
recreamos permanentemente una agenda de transformación pública que incorpore
nuevas demandas que nuestra sociedad fue teniendo, y que las canalizó un
discurso opositor como el de Massa en la primera vuelta y el de Macri en el
ballotage”.
“Por eso la importancia
estratégica para los próximos tiempos de ocupar la calle cuando la realidad así
nos convoque, pero también saber generar organizaciones populares y
representaciones políticas que nunca pierdan el vínculo con nuestro pueblo, con
lo que pasa en el barrio, con lo que pasa en la fábrica, con lo que pasa en la
calle, porque es ahí donde uno tiene el oído puesto en que es lo que está
demandando, reclamando, necesitando nuestro pueblo, y en función de eso uno
también enriquece lo que viene haciendo, mejora, toma cuestiones que tal vez
las creíamos secundarias y que, efectivamente, muchas de esas demostraron que
eran importantes. Es parte de la condición militante entender que la lucha
siempre continúa y tenemos que tener la capacidad de hacer un ejercicio
permanente de aprendizaje, de interpretar lo que las mayorías sociales nos van
marcando”.
“El momento, más que nunca, nos
convoca a todos a ser protagonistas, a pensarnos como ciudadanos comprometidos,
como militantes, el desafío es ser sujeto en el sentido del rol protagónico que
todos tenemos porque es esto lo que nos va a ir llevando a poder hacer frente a
lo que se viene y a ser capaz de gestar una opción en el mediano plazo de
gobierno”.
“En el ballotage se vio
claramente, el pueblo, la militancia, estuvo más a la altura de las
circunstancias que muchos dirigentes de nuestro propio espacio político. Muchos
que tenían sus lugares garantizados en las listas hicieron la plancha, fue el
pueblo, fueron las organizaciones militantes, las que salieron a ponerse al
hombro la campaña y estuvimos así de cerquita de ganar las elecciones”.
“No venimos de perder por 10 o 15 puntos, venimos
de perder por casi 3 puntos. Este proyecto político tiene a su vez un fuerte
consenso en la sociedad. En los años ’90 vos hablabas de un Proyecto Nacional y
Popular y te miraban como un bicho raro. Hoy prácticamente la mitad de la
sociedad cree que este es el camino para la Argentina, y otro tanto - estoy
convencido - en menos de un año se van a empezar a arrepentir de a quien le
dieron el voto, sino ya algunos ahora”.
“Nosotros tenemos que salir a explicar
lo más clara y pedagógicamente posible que implica cada una de las medidas que
se están tomando”.
“Hoy volvió a gobernar en
Argentina el poder económico, histórico, que se creen los dueños del país. Para
gobernar necesitan una fuerza política que la tienen, el PRO, pero necesitan
algo más también, los medios hegemónicos de comunicación, que los tienen, ya lo
vimos en estos días, la política va a ser volver a frivolizar la comunicación y
la política cultural en Argentina. Ahí tenemos una tarea fundamental,
explicativa, pedagógica, desde abajo. Siempre dijimos que esa es una tarea
central, la palabra, el mano a mano, sin enojarse, encontrándole la vuelta,
para que el vecino pueda entender por lo menos cual es nuestra posición y
romperle algún prejuicio que podía tener respecto a nuestro proyecto político.
Hoy más que nunca esa tarea de la palabra, esa pequeña batalla cultural va a
ser central porque la política mediática hegemónica va a ser desinformar,
invisibilizar, a través de la frivolización de la comunicación”.
“Termino con esto, un factor más.
Poder económico, derecha política – el PRO -, partido mediático y el Poder
Judicial. Es este el eje que garantiza los intereses de los sectores dominantes
argentinos. Ya lo dijo Macri el día de la asunción: ‘El poder judicial va a
tener independencia”. Pero la independencia que va a tener ya sabemos qué tipo
de independencia es, es independencia de
la voluntad popular, pero va a tener dependencia del poder económico como
históricamente fue. Este es el sector que se cree dueño de la Argentina, los
que han hecho de nuestro país históricamente un país para pocos y que hoy
vuelven a gobernar”.
“Nosotros tenemos el enorme desafío
de volver a generar consenso, organización, movilización, en el grueso del
pueblo argentino, que esto, insisto, abarca a los compañeros de los barrios más
postergados, a los trabajadores, pero también tenemos que tener la cabeza
abierta para convocar a sectores medios, profesionales, industriales pequeños y
medianos, comerciantes pequeños y medianos, porque ellos van a empezar a ver –
y ya lo están viendo – que este modelo económico los perjudica”.
“Tener bien claro cuál es la
disputa, poder pensar entre todos como nos encontramos en Argentina, en Santa Fe
y en Rosario, y cual tiene que ser nuestra reacción inmediata que es la que
estamos llevando adelante. Por eso, insisto, necesitamos que cada convocatoria
que se haga en defensa de alguna conquista estemos todos compañeros, haciendo
todos el esfuerzo, acomodarnos los tiempos para poder estar, decir presentes,
porque mientras más seamos mejor”.
“Y de la mano de esto, no dejar
de construir organización política, es fundamental tener la perspectiva de
mediano y largo plazo, resistir en la coyuntura y en el presente, pero no
perder de vista la importancia de construir organización política porque eso es
lo que nos permite después estar en mejores condiciones de dar la disputa
electoral, y esto se cambia estructuralmente y de fondo ganando elecciones”.
“Nosotros en este tiempo vamos a
resistir, pero en esa resistencia nos tenemos que preparar para las futuras
coyunturas electorales que son en 2 años y después en 4, para llegar de la
mejor manera y volver a ser gobierno en nuestro país y tener una opción en la
provincia de Santa Fe y en nuestra ciudad de Rosario, convencidos que hay cosas
por mejorar”.
“Buena parte de los desafíos
futuros tienen que ver con llenar de pueblo, llenar de participación, llenar de
militancia y llenar de representantes que surjan de ese pueblo, de esa
participación y de esa militancia, para hacer del Frente para la Victoria la
fuerza política nacional, popular, transformadora y democrática, que fundaron
Néstor y Cristina, y que ahora más que nunca está en los cuerpos, en los
hombros, en los corazones, en la cabeza y en la entrega de cada uno de nosotros”.
“Como dijimos antes del 22, si ganábamos
el desafío era cómo seguimos haciendo del país conducido por Scioli un país
cada vez más justo, pero si perdíamos que a nadie le quede la duda que nosotros
vamos a seguir estando en cada unos de los barrios donde nuestra organización
construye su fuerza territorial y en cada uno de los lugares donde la
coyuntura, el momento político y el proyecto por el que militamos y estamos convencidos que es el que le va a resolver de fondo los problemas a todos los
argentinos”.
“La importancia de que cada uno
se asuma más que nunca como protagonista, como militante, como referente, como
dirigente. Lo dijo Cristina en su último discurso, los dirigentes que no estén
a la altura de las circunstancias los hacemos a un lado y hacemos surgir dirigentes
que no sólo estén en las buenas, cuando
somos gobierno, cuando hay lugares en las listas, cuando hay cargos en el
Estado nacional; la diferencia con el militante es el que está en las buenas
haciendo que las cosas sean cada día mejor y en las malas poniéndole el cuerpo,
el pecho, haciendo de la adversidad un desafío para construir una nueva
victoria”.
A continuación les dejamos el video:
https://www.facebook.com/ArtolaSeba/videos/617540648383859/?theater